Las fiestas que se acercan propician un aumento de los índices de colesterol 'malo' LDL. Abusamos de alimentos grasos y nos movemos menos.
Al margen de los consabidos consejos sobre la disminución de grasas animales en nuestra dieta diaria, la recomendación más valiosa para conseguir mantener nuestros niveles de colesterol en índices adecuados es tratar de que la mitad de los alimentos que ingerimos diariamente sean de origen vegetal. Con ello conseguimos una fuente natural de antioxidantes y, además, nos saciaremos con una dieta libre de grasas animales.
Es recomendable aumentar el consumo de alimentos 'aliados' que ayudan a controlar el colesterol LDL. Entre ellos se encuentran la avena, la cebada, las legumbres, la berenjena, frutas como manzanas, uvas, fresas o cítricos, las nueces, el aceite de oliva y los pescados grasos o azules.